Soy asiduo llector de su publicación y les felicito por la labor que están haciendo informando a todos los vecinos de todo lo que sucede en la zona.
Todos los días soy uno de los sufridores que tienen que soportar el atasco que se produce a la salida de La Moraleja. A veces tardo más en pasar de la Plaza de la Moraleja que en llegar a mi trabajo en Madrid. Y todo por las obras que están haciendo en la calle de la gasolinera. Por otra parte, también quiero denunciar, aunque no va a servirme de nada, la situación del parking de la Plaza de La Moraleja. Desde que se han implantado tanto restaurante no hay forma de aparcar, especialmente los fines de semana por la noche. Hace unos días había quedado con unos amigos en el Café Pino y estuve más de media hora tratando de aparcar. Fue imposible. Hasta en los accesos de la gasolinera había coches aparcados. Un coche patrulla por la zona haría su agosto.
Antonio Gómez