La Comunidad de Madrid ha adquirido un equipo único en España para evaluar la resistencia al fuego de las baterías de vehículos eléctricos. Este innovador dispositivo, instalado en el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados (IMDEA) Materiales en Getafe, permite simular condiciones reales de fuga térmica. La investigación se centra en prevenir situaciones extremas causadas por sobrecalentamiento y cortocircuitos, lo que es crucial para la seguridad de los vehículos eléctricos. Este sistema no solo mide el daño por llamas, sino también el impacto de las partículas expulsadas durante la combustión. Con este avance, se respalda la investigación sobre materiales seguros contra incendios y se evalúan nuevos compuestos para aplicaciones industriales.
La Comunidad de Madrid ha adquirido un equipo innovador, único en España, destinado a evaluar la resistencia al fuego de los materiales empleados en las baterías de vehículos eléctricos. Este dispositivo ha sido instalado en el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados (IMDEA) Materiales, ubicado en Getafe, y tiene la capacidad de replicar una fuga térmica en condiciones reales.
Las situaciones extremas que pueden afectar a las baterías suelen ser provocadas por factores como el sobrecalentamiento, cortocircuitos internos, sobrecarga o daños físicos. Por ello, la investigación orientada a prevenir y contener estos incidentes es de vital importancia para los fabricantes de vehículos eléctricos. El nuevo equipo permite realizar evaluaciones exhaustivas sobre los materiales más utilizados en las carcasas de las baterías cuando se enfrentan a un aumento incontrolado de temperatura y presión, lo que puede resultar en combustiones intensas y expulsión de partículas.
A diferencia de los ensayos convencionales que solo consideran el daño material por exposición directa al fuego, este sistema innovador también examina el impacto de las partículas generadas durante la combustión. Esto es fundamental para replicar con mayor precisión los riesgos asociados a fallos en las baterías. Cuando uno de estos dispositivos se incendia, no solo genera llamas, sino que también libera partículas debido a la combustión interna, lo cual puede erosionar o vaporizar la superficie del material y debilitar sus barreras protectoras.
Este equipo de ensayo es uno de los dos únicos existentes en toda Europa y respalda la extensa investigación y desarrollo que lleva a cabo el Instituto sobre materiales seguros contra incendios, recubrimientos resistentes al fuego y compuestos de alto rendimiento. Gracias a esta tecnología, los investigadores podrán evaluar y demostrar el potencial de nuevos materiales para aplicaciones industriales.