“Todo el residente en Alcobendas tendrá derecho de paso, independientemente del distintivo del vehículo con el que acceda, porque se va a implantar sin perjudicar a los vecinos”, afirma el concejal de Movilidad de Alcobendas, Carlos Rodrigo.
El requisito para poder acceder sin restricción será que el vehículo figure dado de alta en el padrón del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) del municipio o que el conductor sea residente en Alcobendas.
Los objetivos de estas áreas son, en primer lugar, reducir los niveles de contaminación ambiental y acústica y mejorar la calidad de vida de los residentes, también, promover una movilidad más sostenible, favoreciendo el transporte público colectivo y medios y vehículos menos contaminantes y potenciar el uso de las vías públicas por parte de los peatones, teniendo en cuenta que es una zona con muchas personas mayores. En cualquier caso, la Ordenanza de Movilidad permite la libre circulación de vehículos en todas las calles que componen el perímetro del área regulada.
La implementación de esta zona en el casco histórico conlleva la instalación de una serie de equipos tecnológicos que incluye cinco estaciones fijas y una móvil para monitorizar la calidad del aire; el tendido de fibra óptica para una correcta transmisión de los datos al Centro de Comunicación de la Policía Local, y una aplicación web para la gestión en tiempo real del funcionamiento de la ZBE, que estará operativa durante 2025.